LAURA SENA Levante-EMV
Bloc-Verds denuncia el olvido, reclama que sea rehabilitada y colocada en el claustro del Castell
 A pesar de la trascendencia de sus trabajos médicos y sus postulados valencianistas a principios del siglo XX, la placa escultórica que Alaquàs, su pueblo natal, le dedicó en 1926 al doctor Faustí Barberà y que está colocada en la calle que lleva su nombre, se deteriora en el olvido. la mencionada placa está esculpida con su retrato y también tiene grabado su nombre, además de un adorno floral. el paso del tiempo, por un lado, y las agresiones, por otro, ya que numerosos cables de suministros la atraviesan, han provocado alguna rotura en la superficie. Por este motivo, el grupo municipal Bloc-Els Verds ha reclamado al consistorio que se inicien «lo más rápidamente posible» los trabajos de recuperación y limpieza de esta placa. así se recoge en una moción que la coalición ha presentado y que se debatirá en el próximo pleno.
Además, Bloc-Verds pide que, una vez restaurada, se cambie su emplazamiento, del actual en la calle que conecta Virgen del Olivar con carretera de Aldaia —la vía que lleva su nombre— al claustro del Castell de Alaquàs para que «recobre así la dignidad que merece el personaje y pueda ser conocida y contemplada por toda la población».
Para apoyar su propuesta, Bloc-Els Verds cita fragmentos de los trabajos que sobre la figura de Barberà ha realizado el investigador local y experto en la renaixença valenciana Rafael Roca, algunos de ellos publicados en los Quaderns d’Investigació d’Alaquàs. Así, la moción recuerda que el médico e intelectual Faustí Barberà está reconocido como un pionero en las técnicas de enseñanza de los sordomudos y fue un destacado valencianista que «debería merecer más atención de los ciudadanos de Alaquàs y del ayuntamiento». Fue el responsable de denunciar «por primera vez el proceso de sustitución lingüística que padecen los valencianos », según los trabajos de Roca, y su discurso más emblemático, «de regionalisme i valentinacultura », pronunciado en Lo Rat Penat en 1902, se considera «la obra que inicia públicamente el lento y trabajoso camino de la reivindicación política nacionalista y su necesaria encarnación social a través de unas influyentes organizaciones políticas».
Notícia publicada al Levante-EMV de 29 de maig de 2012